martes, 8 de marzo de 2011

El lugar


Cuando el viento huracanado sople en la estirpe de la aurora
entonces pensaré en la vicisitud de quedarme solitaria
mirando al cielo y viendo las esponjosas telas blancas de arrecife de coral
con sus peces voladores haciéndolo girar
imitando el ronroneo de un gato al reposar

Cuando el sol brille cortado en lo bajo del gran manantial
y se disponga a acostarse entre las sábanas azules de cristal
entonces pensaré en la persona que me quiere acompañar
que empuja el navío que nunca ha de volcar
porque remar contra ventisca es fácil si sabes nadar

Cuando la nieve descienda del manto incoloro de espuma
y se deposite sobre la tierra del labrador al orquestar
entonces pensaré en la perfecta coyuntura de la compañía en soledad
que se tumba sobre el colchón de puntos marrones donde acaba el mar
respirando profusamente lo que dice el que no debe callar

Cuando la nieve caiga bajo un sol de viento huracanado
entonces dejaré de pensar porque ya habré encontrado mi lugar
                         

No hay comentarios:

Publicar un comentario