Es un sábado por la tarde y estoy una vez más, muy cansada.
Hace sol pero el aire es frío, estoy sentada en la parada del autobús, me ha
tocado trabajar el fin de semana. Pero lo más curioso es que a pesar de todo no
estoy triste. Hay un super héroe sentado a mi lado, es pequeño y no para de
levantarse y correr imitando a Spiderman. Está tan feliz con su disfraz. Subo
al autobús y el ritmo de mi música es lento, invita a reflexionar e incluso a
entristecerse, sin embargo, yo solo consigo sonreir. Las calles estás plagadas
de princesas y super héroes, de hadas, de bomberos y de muchos pitufos y
pingüinos. Ha llegado el color del carnaval y a mi me toca trabajar. Lo bonito
de mi oficio es que sin disfrutarlo, puedes vivir de cerca lo que siente la
gente, debes vivirlo porque alguien lo tendrá que trasmitir. Estoy cansada, sí.
Llevo un ritmo de baile desmesurado pero no puedo parar de volar al ritmo de
los cometas nocturnos, rápidos, fugaces. Quiero poder ser capaz de mirar todos
los rincones del universo que me dé tiempo mientras dure mi luz. Así podré
conocer, opinar y acercarme a ser un poco super héroe.
Molt guapet :) Me n'he recordat d'aquesta cançó mentre ho llegia, escolta: http://www.youtube.com/watch?v=yyualqnsVeU
ResponderEliminarTu eres la meua superheroina :)
ResponderEliminarjajaj! Molt bé tete!
ResponderEliminarGràcies perla! tu eres superwoman!!!
Genial... És genial, Mire.
ResponderEliminarM'encanta ;)